Al cerrar el primer semestre de 2023, Guanacaste concentra el 25% del total de metros tramitados para construcciones de tipo habitacional en el país

           

Marlen Díaz Soto

Esteban Barboza Núñez

 Agosto, 2023

Según datos obtenidos del Colegio Federado de Ingenieros y Arquitectos (CFIA), y analizados y procesados por el Observatorio de Turismo Migraciones y Desarrollo Sostenible de la Universidad Nacional (UNA), Guanacaste es la provincia con mayor auge en construcciones habitacionales y comerciales, especialmente después de la pandemia de 2020 y en lo que llevamos de 2023.

A pesar de que, desde hace aproximadamente una década, la provincia experimenta una tendencia sostenida al alza en este tipo de edificaciones, después del año 2020 se ha dado una explosión en este tipo de construcciones, principalmente alrededor del litoral pacífico de la provincia. 

Según estudios previos realizados por este Observatorio, con datos analizados desde el 2014 y hasta el 2022, es posible advertir cómo Guanacaste ha venido creciendo en cuanto a las construcciones en el sector habitacional.  Ese crecimiento se vio pausado únicamente en el año 2020, debido a la pandemia mundial. Sin embargo, tanto el 2021 como el 2022 significaron aumentos muy pronunciados en este tipo de construcciones en la región, un indicador del boom inmobiliario que experimenta la costa de Guanacaste.

Este crecimiento hace recordar al que se vivió a inicios del siglo, cuando la provincia concentró casi un 30% de la inversión inmobiliaria en el país, solo para detenerse abruptamente en el 2008, con la crisis mundial, un fenómeno que generó enormes consecuencias en el sector inmobiliario y turístico de la región.

Figura 1. Número de metros cuadrados registrados en Guanacaste en proyectos habitacionales y comerciales, 2014-2022. Fuente: Elaboración propia a partir de datos generados por el CFIA.

Ya para el año 2022 Guanacaste era la segunda provincia con más metros cuadrados registrados para construir proyectos habitacionales, solamente superada por San José.  Sin embargo, en datos analizados durante los primeros seis meses del año en curso, ya la provincia costera supera a San José, y concentra la cuarta parte del total de metros cuadrados registrados para construir proyectos habitacionales (25%).  San José ocupa el segundo puesto, con 21%.  En el caso de Guanacaste, este porcentaje significa alrededor de medio millón de metros cuadrados tramitados de enero a finales de julio.

Cabe aclarar que el crecimiento inmobiliario en Guanacaste tiene puntos específicos en los cuales se concentra. Existe un total de once cantones en la provincia, pero es Santa Cruz el que más metros de construcción habitacional registra este año, con casi 290.000m², seguido de Carrillo con 87.000m², y Nicoya con 71.000 m². Estos tres cantones en conjunto suman el 83% de todos los metros de construcción tramitados en el área habitacional, y un 50 % en la parte comercial.

Figura 2. Fuente elaboración propia a partir de datos del Colegio Federado de Ingenieros y Arquitectos. Fuente: Elaboración propia a partir de datos generados por el CFIA.

Además, dentro de estos cantones existen zonas aún más específicas que concentran la mayor cantidad de proyectos habitacionales y comerciales. En el cantón de Santa Cruz, en el distrito de Tamarindo, se han tramitado 149.000m², en Tempate 50.000m², y en Cabo Velas 41.000m². En el cantón de Carrillo, el distrito de Sardinal registra 62.000m² en el área habitacional; y en el cantón de Nicoya es Nosara el distrito que lidera, con 42.000m² en construcciones habitacionales.

Todos estos son distritos costeros, en los cuales la especulación y el acaparamiento de terrenos ha generado, a partir del 2020, un cuantioso aumento tanto en el precio de alquileres como de los terrenos mismos, así como viviendas que alcanzan sumas millonarias en dólares.  Todo esto trae palpables consecuencias, tanto entre quienes tengan que vivir en esas localidades sin tener los medios suficientes para costearse un alquiler o una propiedad, o bien en el aumento en la demanda de recursos hídricos en una región que permanece seca una gran parte del año y el la cual nuevamente se asoman conflictos por el preciado líquido por causa de un modelo de desarrollo que también genera despojo en medio del boom.